Un amigo en tiempos difíciles es a veces mejor que un hermano; hasta la Biblia lo dice.
Tener una buena amistad es un tesoro que se debe valorar al máximo, porque es muy difícil, sobre todo en estos tiempos conseguirlo. Los amigos se convierten en nuestra familia elegida y por ello debemos ser leales y fieles para corresponder a ese cariño que ha nacido no por sangre, ni carne, sino del corazón.
Cuando seas amig@ procura serlo en todo momento; no solo en los momentos difíciles, no cuando necesites un favor del amigo, no sólo cuando quieras desahogar tus tristezas y contar tus problemas; sé amigo también en la alegría, para compartir tus logros, para reír por la solución de aquel problema por el que lloraste; estoy segura de que tu amig@ (si es verdader@) se alegrará contigo.
Somos humanos y por ende no somos perfectos, así que tu amig@ va a errar en algún momento y tal vez te sientas disgustad@ o dolid@ en el momento, pero por favor, no dejes perder tu amistad por malos entendidos; la base de toda relación es la comunicación. Si crees que tu amig@ ha hecho algo que te molesta, ve y habla con él/ella y procura arreglar las cosas; no tomes decisiones drásticas y apresuradas sin dar o recibir las explicaciones del caso, destruyendo eso que para ti mism@ es una hermandad, por cosas tontas que a lo mejor solo están sucediendo en tu cabeza. Más vale preguntar y aclarar, que callar, perder y llorar. CANCIÓN DEL DÍA: Esta canción la tengo súper pegada, "Despacito", by: Luis Fonsi ft. Daddy Yankee. Feliz juernes! DIOS VAYA CONTIGO Y DERRAME SUS BENDICIONES SOBRE TI.
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